Hacía tiempo que estaba en el aire, como esas flores que uno hace volar con un simple suspiro. Dientes de león que sólo esperan lanzarnos la garra de vuelta.
Y no me quedan fuerzas, son muchos frentes, demasiados hoy, y tiro la toalla y pido un respiro.
Hoy París amaneció lloviendo y llora su xenofobia que hace unos pocos días bebí en mi piel, (como os dije en este Adiós) , arrastra el desgano y la indiferencia, la miseria y el desprecio de lo que la rodea. Siempre altiva y madre de revoluciones anda ya cansada, y como yo, le hace una manuela a lo que los agogeros y las adivinas llaman destino, a lo que está escrito en un cielo en el que hoy sólo vislumbro urracas, buitres, y depredadores. Ella no es así, y sé a ciencia cierta que unas generales las pelearía.
Es hora de irse de aquí... lo llevo diciendo hace tiempo, pero todo llega, cuando los cimientos no se cuidan, y dejamos cualquier ideal que sea, político, social, amoroso, o de hermandad al amparo de las hienas... y éstas sí saben cómo cuidar de un jardín en ruinas, perdemos la esencia.
Y en esos casos, prefiero escaparme, la huida es mejor que acabar hacinada entre piojos, y antes de que me falte el aire, o que los trenes me conduzcan a derroteros inusitados e insospechados, prefiero descalzarme y seguir una vía de tren, o una arteria que como vía aún siga sangrando.
El análisis sobre los resultados de ayer ya los dejé en el lugar donde mejor sé que tendrán el eco que merecen.
Hoy me duele Francia.
Me duelo yo.
Y no siento los huesos.
… que te has pasado media vida haciendo y deshaciendo maletas, llevando los
bártulos como un fardo que no pesaba, tejiendo y destejiendo latidos, entre acanto y acíbar, rostros afásicos y
chamarileros, vendedores ambulantes de sueños que sabían a colza, chicoleos y
cristomatías, con el mar de fondo y a la luna de Valencia, respirando hondo y arriesgando
olas, que quien no se moja no atraviesa mares, que en tu mirada vi mi planeta
en el que tú, niño heresiarca me regalabas una rosa, que un verano me viste
pasar, sin dejar de girar y de girar en los viajes de un laberinto de pájaros,
de andenes, de vías de tren sin destino, de círculos que no acababan por
cerrarse, hasta el día en que los nudos empiezan a desatarse, y acabas bajo una
dipsomanía ecléctica, y sueltas la sonrisa, y la pintas con pompas de jabón,
frágil, etérea, y aunque aún regale rosas con espinas, que mi cuerpo no es
fácil, y quien se arrima que se lastime y se duela, que se coma esas espinas,
que se lance en trampolín a los huesos que en estela deja la piel en su abismo,
que sólo quiero ser viento para que mis manos y mi talle bailen bajo tambores
de selva, que ha llegado el tiempo de las nadas y nadando uno se hunde más en
el vacío, que ya no hay nada más que recoger tras la siembra, que algunas son
baldías, que la esperanza se ha teñido de azules, que lo verde ya no cobija,
que la buena sombra y el buen abrazo distan de los pétalos de las nubes, que
sigue lloviendo y París llora, porque atenazan las sombras de una primavera
negra y tardía.
Sé que la vida me y nos seguirá besando en la boca, pero a la mía, ya la voy cubriendo de hechizos y besos rotos para que quien me bese, se estrelle en ella.
Hoy besos de rosas con espinas...
Es lo que hay.
Eso sí, con el canalillo, pero con rebequita, que estamos de vuelta a la lluvia y al otoño.
Retirarse, huir, replegarse pero con la frente en alto mi querida Eva.
ResponderEliminarAquí también volvió el otoño... y el PP. Por lo menos, en Cataluña no se han comido un rosco. Y una puerta a la esperanza se abre con "Podemos"
ResponderEliminarLo de Francia lo interpreto como un voto de castigo a los partidos mayoritarios, no como una tendencia ideológica ¿no crees?
mañana (o pasado) saldrá el sol
Cada vez me dan más miedo, cielo...
EliminarNo creo, tengo el presente muy nublado por todos los frentes.
Anoche, al ver incrédulo los resultados en Francia, inmediatamente pensé en como te sentirías, traté de no afincarme en el tema, pero no pude evitar un escalofrió en mis recuerdos...
ResponderEliminarEn el ranchito siempre estarás segura :)
Besos y salud
de hetairas se surte el mundo /
ResponderEliminarcomo de espanto y vergüenza.
(nos) duelenfrancias
(nos) dueleneuropas
(nos) rechinanespañas
Y salud para comprobarlo, que no paciencia
Besos, Eva
Ufff, Eva, como vas deslizándote entre letras por el tobogán carcomido del dolor e incluso el espanto al que quieres no sucumbir pero te puede...te crece como espinas de dentro afuera ante este tren que arrolla todo.
ResponderEliminarEl mundo vira hacia un camino que parecía yermo y quizá lo estaba, pero en el que comienzan a brotar cactus espinosos entre un desierto de ideas coherentes y llenas de humanidad, una humanidad que se desangra,Eva, una humanidad carente de lo más básico por lo que va descalzándose e introduciéndose en un fango absorbente sin posibilidad de salida.
Es lo que hay, como bien dices. Nos dolemos de Francia, nos dolemos de España que araña y nos dolemos del mundo en general que se nos va de las manos.
Besos muchos, hermosa.
Tremendo.
ResponderEliminarAyer pensé en ti al ver las noticias.
Esas sombras atenazan y caen desplomadas sobre tantos corazones.
Hoy te abrazo fuerte, querida Eva
Pero es la solución huir?
ResponderEliminarTan cansada te sientes?
La verdad es que entre Francia y Grecia...
Sombras, muchas sombras son ya estas.
Te abrazo
Te comprendo porque a mí también me duele Francia y Bélgica y Austria...
ResponderEliminarNos sentimos capaces de librar luchas contra ejércitos enteros, Davides contra Goliates. Pero a veces el odio puede más y no nos queda más que la huida... Yo te abrazo en este momento negro del mundo.
ResponderEliminarno tengo palabras hoy... no entiendo lo que pasa en Europa, no entiendo lo que pasa aquí (y con aquí hablo de España y de esta comunidad valenciana que me tiene totalmente descolocada...)
ResponderEliminaranoche no sé si sentí mas rabia o miedo...
y como te decía, no tengo palabras...
así que besos de lunes y ánimo, guapetona!
Mi canalillo es una avenida más ancha que cualquiera de la existentes.
ResponderEliminarEse "chiste de Quino donde no se cuidan libertad, justicia, maternidad, amor, etc y se mima al mono ancestral que todos somos, pasará pronto.
Y las sonrisas de la ultraderecha serán muecas, ya lo verás.
París bien vale una misa...(y un esfuerzo)
Se veía venir la rubita. Espero y confío que en las generales cambie el voto.
ResponderEliminarAquí podemos y se ha demostrado.
Besos de lunes martes etc.
Esperemos que se corrija el camino
ResponderEliminarLos besos, siempre. Hasta en el canalillo
era algo sabido y es algo general. En toda europa sucede lo mismo. De hecho es Alemania quien conduce los destinos metiendo presión a todos. En España no están mejor querida. El único lugar del mundo que queda para refugiarse es en nosotros mismos. Parece 1938 esto.
ResponderEliminarQue gané el PP es malo, que gane la derecha es malo, pero que ya gane la extrema-derecha, esto es muy peligroso. Besos EVA, y cuidado con el canalillo, que ahora los resfriaos son muy jodidos.
ResponderEliminarFeliz huída. Yo lo hago a diario.
ResponderEliminarUn beso.
Comparto tu dolor, lo siento mucho.
ResponderEliminarNo bien vi los resutados pensé en o mal que te sentirías...
Un beso y un abrazo desde mis divinas vacaciones
Ojala pronto te puedas sentir mejor. Recuerda que vayas a donde vayas tu felicidad la construyes tu. Que importa si se cae el mundo a nuestro alrededor... si se es feliz con todo... Te entiendo, Asi mismo me senti hace un tiempo atras; pero logre superarlo.... Espero tambien lo logres. Saludos
ResponderEliminarYo me quedé alucinada, Eva. Espero que ese país que tantos ejemplos ha dado, entone el rumbo.
ResponderEliminarUn beso, cielo.
Querida Vero, tu eres una luchadora innata,
ResponderEliminarnunca se puede tirar la toalla.
Piensa que siempre se puede.
Te abrazo y te beso.
Madreselva:
ResponderEliminarTextos los tuyos que llegan al corazón.
Espero que los políticos actúen ya y frenen el desatino de las masas volubles.
Salu2 esperanza2.