Me encanta todo lo que cuentas de las palabras esas que nos dan cuartelillo para decir lo que queremos o callar con los silencios que también son palabras, esas palabras que nos acompañan a vivir esta vida que no será buena pero es la que nos tocó. Un beso enorme, mi querida Eva.
Es cierto, la vida siempre está ahí, incluso aunque nosotros no estemos... Hace tiempo que nadie llama a mi puerta, quizá por temor a contagiarse de algún tipo de enfermedad terrible que yo padezca y no me haya percatado de ello... Besos y salud
La vida acecha, es cierto. Y no podemos manejarla al punto de quererlo todo ya que solo nos permite un tiempo de recorrido por este mundo. Y solo es posible vivir plenamente algunos momentos si nos ponemos a corazón abierto y sin temor al infarto. Saludos.
No cansarse es lo duro, lo difícil. Lo fácil es aceptar la derrota y dejar entrar a los imbéciles. No cansarse tiene la elegancia de lo sencillo (eso que es tan duro, tan difícil).
Te leo y me viene a la mente algo así como un ovillo que puede pasarse horas y horas liado y enganchado y atrapado y buscando salidas que sabe que son puertas cerradas (espejos que dan la espalda), pero que sabe cómo volver a encontrarse con un semáforo que (de ahí, soñar en verde) sin pedir permiso le sonríe y le invita, sin prisas y con mucha calma, a desovillarse.
Y la vida sigue ahí. Observándonos y, alguna que otra vez, ruborizándose al sentirse mágica y observada.
Ahí está la vida, siempre al acecho cargada de enseres inútiles y de momentos espléndidos y de palabras que nos hieren o ensalzan, nos matan una y otra vez para resucitarnos de nuevo en una de sus oleadas de compasión. Nos mantiene la vida embrollados en ella y cuando le apetece, nos descuelga un poco, nos deja creer que somos libres y... En fin...a pesar de todo: LA VIDA. Sí, Eva, ¡c'est la vie! Besos miles.
Totalmente de acuerdo, "a los melancólicos lo que menos nos asusta es la nostalgia" . Gracias por el texto, tan apropiado en este instante para una más del cuartel melancólico. Saludos
La vida desde luego que está esperandonos con una caja llena de sorpresas; de la buenas y de las malas, llevandonos desde el cielo hasta el infierno en un abrir y cerrar de ojos. Ella, es así.
Creo que sí, que la vida empuja con fuerza a ser vivida. Desde cualquier rincón, a resguardo de cualquier abrigo. Ahí va moviéndose siempre , o casi siempre, con el viento a nuestro favor. Tu texto da a pensar. Y mucho. (No sé si este comentario pasa. Espero sí) Besos, Eva
No me ves pero te hago la ola. Por cierto que horas más raras, para que tú andes publicando por aquí EVA.
ResponderEliminarBesos hermosa.
Zarzamora:
ResponderEliminarHermosas palabras, extrañas relaciones, asombrosas ideas...
Salu2 palabrosos.
Me encanta todo lo que cuentas de las palabras esas que nos dan cuartelillo para decir lo que queremos o callar con los silencios que también son palabras, esas palabras que nos acompañan a vivir esta vida que no será buena pero es la que nos tocó.
ResponderEliminarUn beso enorme, mi querida Eva.
Es cierto, la vida siempre está ahí, incluso aunque nosotros no estemos...
ResponderEliminarHace tiempo que nadie llama a mi puerta, quizá por temor a contagiarse de algún tipo de enfermedad terrible que yo padezca y no me haya percatado de ello...
Besos y salud
Zarza, cómo consigues guiarnos con tus palabras y metáforas desde el inicio al final, como si estuviéramos en el cole. ¡Me gustó mucho!
ResponderEliminarBessets.
La vida acecha, es cierto. Y no podemos manejarla al punto de quererlo todo ya que solo nos permite un tiempo de recorrido por este mundo. Y solo es posible vivir plenamente algunos momentos si nos ponemos a corazón abierto y sin temor al infarto.
ResponderEliminarSaludos.
nunca, nunca da una tregua
ResponderEliminarqué hermosa profe de lengua
Besos.
La vida puede ser calma pero también llegar a ser tormenta, de todo nos podemos encontrar.
ResponderEliminarUn beso.
Nos espera como la misma muerte.
ResponderEliminarAmbas se dan la mano en un pacto, pero acaba ganando la silenciosa.
Una maravilla este texto, es poético y reflexivo.
Besos, querida Eva
Lo leo y lo vuelvo a releer, es precioso ¡ yo no se expresarme así.! Besos Zarzamora.
ResponderEliminarNo cansarse es lo duro, lo difícil. Lo fácil es aceptar la derrota y dejar entrar a los imbéciles. No cansarse tiene la elegancia de lo sencillo (eso que es tan duro, tan difícil).
ResponderEliminarTe leo y me viene a la mente algo así como un ovillo que puede pasarse horas y horas liado y enganchado y atrapado y buscando salidas que sabe que son puertas cerradas (espejos que dan la espalda), pero que sabe cómo volver a encontrarse con un semáforo que (de ahí, soñar en verde) sin pedir permiso le sonríe y le invita, sin prisas y con mucha calma, a desovillarse.
ResponderEliminarY la vida sigue ahí. Observándonos y, alguna que otra vez, ruborizándose al sentirse mágica y observada.
Un abrazo.
Ahí está la vida, siempre al acecho cargada de enseres inútiles y de momentos espléndidos y de palabras que nos hieren o ensalzan, nos matan una y otra vez para resucitarnos de nuevo en una de sus oleadas de compasión.
ResponderEliminarNos mantiene la vida embrollados en ella y cuando le apetece, nos descuelga un poco, nos deja creer que somos libres y...
En fin...a pesar de todo: LA VIDA.
Sí, Eva, ¡c'est la vie!
Besos miles.
Vívela y no te arrepientas.
ResponderEliminarSiempre un placer leerte. Vamos a vivir!!!
ResponderEliminarAbrazos
La vida y la muerte siempre acechan. Nuestras decisiones las moderan. Un gran texto querida Eva.
ResponderEliminarMil besicos.
Totalmente de acuerdo, "a los melancólicos lo que menos nos asusta es la nostalgia" . Gracias por el texto, tan apropiado en este instante para una más del cuartel melancólico. Saludos
ResponderEliminarProfe de lenguas, claro, de las mas antiguas a la mas agil.....
ResponderEliminarLa vida desde luego que está esperandonos con una caja llena de sorpresas; de la buenas y de las malas, llevandonos desde el cielo hasta el infierno en un abrir y cerrar de ojos. Ella, es así.
ResponderEliminarBss.
Creo que sí, que la vida empuja con fuerza a ser vivida.
ResponderEliminarDesde cualquier rincón, a resguardo de cualquier abrigo. Ahí va moviéndose siempre , o casi siempre, con el viento a nuestro favor.
Tu texto da a pensar. Y mucho.
(No sé si este comentario pasa. Espero sí)
Besos, Eva
Del otro lado del espejo todo es diferente...
ResponderEliminarBesos de conejito!!
Poesía.
ResponderEliminarUn beso.
Reflexiones sobre la vida y sus alegrías y tristezas.
ResponderEliminarAsí es la vida un compendio de hechos, a veces, incomprensibles, a veces maravillosos......
una lluvia de besos