Puedo considerarme una de las personas más afortunadas del mundo porque desde que nací, mis ojos desplegaron sus olas ante una ventana frente al mar.
Dulce, salvaje, sereno o bravío, acarició cada instante de mi vida al compás de sus resacas en cada una de mis tantas vidas.
Me golpeas las eternidades bajo un rugido en calma. Resaca de vida que arrastran tus mareas.
Hundo los pies en la arena de esperanzas nuevas, ahogando el vacío de las horas, mientras el salitre dibuja mi aliento en tu sed.
Y una y otra vez cabalgo en tus olas dibujando los traviesos recuerdos de una infancia perdida.
La espuma me penetra, baña mi cuerpo, lo borda de encajes, lo perfuma de brea.
En ese vaivén "oleáico" renazco y cicatrizas mis llagas, vomito mis miedos y brilla una sonrisa. Me engendras de algas, de plancton, de corales.
Y en ese baile místico de olas transcurre mi vida, acompasada en el latido de un tímido sol que columpia el reflejo de sus sueños en mis pupilas.
Es hora de regresar, y en el bolsillo te llevo, acompañando la lontananza de tus besos.
Imágenes E.M. Entre un 2014 y 15.
Y en ese baile místico de olas transcurre mi vida, acompasada en el latido de un tímido sol que columpia el reflejo de sus sueños en mis pupilas.
Es hora de regresar, y en el bolsillo te llevo, acompañando la lontananza de tus besos.
Imágenes E.M. Entre un 2014 y 15.
El sueno de mi vida, pero vivo en tierra...en- tierrada !
ResponderEliminarEste Mediterráneo nuestro, ese tan vivaz y alegre como triste o enérgico e incluso furioso...ese mar inmenso que cabe en el bolsillo del corazón...
ResponderEliminarPreciosas palabras con el colofón de Serrat.
Besos miles, hermosa.
aquí te esperan las olas
ResponderEliminarhola
No sabes cómo te entiendo...
ResponderEliminarLa montaña es más variada que el mar, pero el mar tiene algo que siempre subyuga, Zarzamora.
ResponderEliminarEl mar en una playa salvaje, eso sí que es el paraíso.
Salu2 marítimos.
Nací en las inmediaciones de los Apeninos y las montañas me fascinan. Son símbolos de elevación.
ResponderEliminarAmo también el mar, especialmente el Mediterráneo, porque representa las profundidades más hondas, allí donde yacen los secretos del alma humana.
Adoro el tema de Serrat, gracias, Eva.
Un abrazo con gusto a sal, arrullado por el viento que sopla en las montañas.
Yo nací donde no hay mar, pero lo adoro, soy feliz viendo las olas, la arena, todo. Besos marinos.
ResponderEliminarQué buena suerte la tuya poder disfrutar de las bellezas que te brinda ese mar de colores.
ResponderEliminarFeliz 2.015, un abrazo.
Y que esos lindos ojos, vean eso bello mar, durante muchos, pero muchos años.
ResponderEliminarBesos EVA.
Me has hecho volver a escuchar este tema, que es como un himno, con el que todos los mediterráneos nos reconocemos. Gracias y besos, arrebatada escritora.
ResponderEliminarTe ha quedado precioso, me conmueve ese sentimiento por tu mar estando tan lejos de el...habitualmente, no se hoy :)
ResponderEliminarAunque posibilidad de resaca siempre la hay...:)
Besos y salud
Precioso Eva, me llena de emoción entrar de nuevo por estos lares y encontrarme tan sublimes versos...
ResponderEliminarTodo mi cariño ♥
Es que... menudo mar tenemos ¿eh? :)
ResponderEliminarMe gustó el vaivén de letras y mar, es un vaivén que no esconde su enamoramiento.
Gracias por visitar tu planeta y permitirme así descubrir tu madreselva rebelde.
Saludos.
Y entre tus letras se oye el mar enredado en tu sonrisa y tus pensamientos.
ResponderEliminarPrecioso
una lluvia de besos
El mar se mete dentro y forma parte de la misma sangre.
ResponderEliminarYa sabes que yo no nací mirando el mar, pero lo he vivido muchos años, así que, puedo entender a quien ha crecido mirándolo y viviéndolo.
Me has dejado una sensación de nostalgia recorriéndome la salitre de la memoria.
Besos, querida Eva