Sufrir por amor puede que no sea hasta una crueldad te dije, y al rato, me mordí los labios...
Pero sufrir por amor es un destrozo al igual que morderse los labios...
Una infame y mediocre pérdida de tiempo.
Ayer que ya no es hoy, me hubiese atrevido a decírtelo sólo con un orfidal debajo de la lengua, pastilla precursora de la moneda que le espera a medio planeta aunque la mitad aún ni lo sepa, con la que hubo un día que le pagué a Caronte y si Hades quiere perderé la memoria...
No hay teléfono de la esperanza que valga... y tal vez y ni siquiera exista la palabra precisa, ni la sonrisa perfecta.
Nunca te preguntaste lo que podía ser mi vida diaria. Me soñaste incluso mal. Probablemente por estar demasiado centrado en la forma y la manera que la relación pudiese encaminarse. Se te olvidó incluso que tenía una mirada y una voz.
Sabías que te mandaría una señal. Lo sé porque hace siglos que ya no recurro a las palabras sino al instinto primerizo.
Curioso.
Palabras y más palabras escritas y frente a frente siempre ese silencio ensordecedor.
Te dije todo menos lo esencial, lo que viniste a oír.
Sabías que te mandaría una señal. Lo sé porque hace siglos que ya no recurro a las palabras sino al instinto primerizo.
Curioso.
Palabras y más palabras escritas y frente a frente siempre ese silencio ensordecedor.
Te dije todo menos lo esencial, lo que viniste a oír.
(…) Suena el móvil, el lado opuesto de las ondas.
Me decido a tomar el hilo de un joven deseo recién nacido.
Cuando la luminosidad vuelva a iluminar la realidad, ya estaré todavía más al sur.
Me decido a tomar el hilo de un joven deseo recién nacido.
Cuando la luminosidad vuelva a iluminar la realidad, ya estaré todavía más al sur.
Ese « te deseo » que nuestros pensamientos dejan imprudentes a lo largo de nuestras bocas, bajo nuestras miradas, nunca supimos pronunciarlo.
¿Tu conversación ?
A todo el mundo le importa un bledo en esos casos los temas de conversación.
De todas formas nunca tuviste un tema de conversación. Sólo el hecho de oírte conversar te fastidia. Hablarse todos los días está de más.
-¿Qué tendremos que contarnos después ?
Tienes razón.
-Nada.
Palabras y más palabras. Sólo palabras...
A todo el mundo le importa un bledo en esos casos los temas de conversación.
De todas formas nunca tuviste un tema de conversación. Sólo el hecho de oírte conversar te fastidia. Hablarse todos los días está de más.
-¿Qué tendremos que contarnos después ?
Tienes razón.
-Nada.
Palabras y más palabras. Sólo palabras...
Ambos aprendimos el uno del otro pero no era necesario.
Río con facilidad alegre e indomable. No estoy quieta. Tú balanceas nervioso la pierna izquierda con un tic tic.
No dejas de mirarme.
No dejas de mirarme.
Silenciosa en estos casos, en los que el cara a frente es absurdo, callo.
Te asesino con la mirada… « eres muy fina » dices.
Pero ya no hago ningún esfuerzo, excepto el de levantar montañas por quien de veras quiero.
Y llega el tren.
El resabio del calor de la vida hace resonar en el silencio un cielo desparramado de nuevas lunas por venir.
Te asesino con la mirada… « eres muy fina » dices.
Pero ya no hago ningún esfuerzo, excepto el de levantar montañas por quien de veras quiero.
Y llega el tren.
El resabio del calor de la vida hace resonar en el silencio un cielo desparramado de nuevas lunas por venir.
Un día pronunciaste las palabras de más, las que llegaron con el dulzor de algo que yo creía olvidado. Pronunciaste las palabras que no había que pronunciar. Pura pantomima a la que nos colgamos como títeres llevados por una fascinación mutua que no llegó a colmar el éxtasis amoroso, el deseo, las ganas, el instinto de posesión. Sólo hubo orgullo y el terror del miedo al abandono y al rechazo una vez más.
Un sentimiento nuevo se apodera hoy de mí, sólido y tan frágil que me desgaja de lo anecdótico, de los orgasmos mecánicos como el mítico aquel de Meg Ryan , de los amargos placeres de una huida.
Suelo escuchar poco, soy más de mirar, ver, observar y tocar.
Siempre aprendí más viendo a los seres vivir que escuchándolos contarse.
Cuando no tengo elección me pongo a escribirme, a escribirte. Ante el ensordecedor silencio de esta reflexión, que me dice que el vacío reside en todos y cada uno de nosotros, acepto con tristeza la conciencia que regresa hasta mi alma y me digo de manera plácida y distante que mi vida por llegar, ya llegó hace mucho más que tiempo, y que habrá de contentarse a partir de ahora, a aceptarse y a vivir con mucha más inconstancia e irresponsabilidad, y cada vez más...
"Buscando asilo político para mi corazón que perdió la cabeza a fuerza de no encontrar sus pedazos". E.M.
Siempre aprendí más viendo a los seres vivir que escuchándolos contarse.
Cuando no tengo elección me pongo a escribirme, a escribirte. Ante el ensordecedor silencio de esta reflexión, que me dice que el vacío reside en todos y cada uno de nosotros, acepto con tristeza la conciencia que regresa hasta mi alma y me digo de manera plácida y distante que mi vida por llegar, ya llegó hace mucho más que tiempo, y que habrá de contentarse a partir de ahora, a aceptarse y a vivir con mucha más inconstancia e irresponsabilidad, y cada vez más...
"Buscando asilo político para mi corazón que perdió la cabeza a fuerza de no encontrar sus pedazos". E.M.
el problema no es que no entienda o no sepa interpretar sino que decís que ni lee... ahí se complica...
ResponderEliminarbesos!
No digo que no lea... sino que no sabe... ni supo...
Eliminarhay que leer ... sonrío.
besos!
Bueno, a ves no se sabe leer y a veces no se quiere leer, y a veces no se puede leer...
ResponderEliminarY por suerte, no todo es leer...
Eliminar... sobretodo hay que saber leer entre líneas que es lo mismo que saber leer.
ResponderEliminar... o al menos intentar leer.
EliminarHay silencios que no se olvidan sino que suman. Incluso tenemos momentos de añoranza del tiempo lo que se fue, tratamos de curarlo con canciones mientras no cierra la llaga y el anhelo y el deseo late.
ResponderEliminarOjalá el desgarro cese.
Tu entrada de hoy me deja pensando.
Un beso.
Es una vieja entrada... un "auto-plagio de los míos con variaciones ;)
EliminarNada qué ver con un desamor que me toque personalmente y de cerca, y en este instante.
Lamento haberte dejado un resabio amargo.
la entrada cumplió su cometido si bien no dejó su comentario, pues la re-escribí para alguien que aprecio, sé la leyó y... hasta aquí, puedo leer.
Un beso.
Llevo unos días un pelin rara sin saber muy bien que me pasa... te he leído y es como si te hubieses metido dentro de mi y sacado todo ese no se que...que no puedo explicar.
ResponderEliminarTu eres bruja o qué?
:) Besos cosa guapa.
De eso me tratan los más....
EliminarConocidos, y hasta los que ni me han visto la verruga de la barbilla, ni el roomba, ni...
sonrío.
Besos a ti, rewapa.
El desamor...
ResponderEliminar¡Tremenda putada!
Besos y salud
Ya te digo, y qué no sabrás tú...
EliminarBesos, y salud!
Eso sólo lo hace un corazón ignaro.
ResponderEliminarY el tuyo ya tiene casa y no necesita ni permiso de residencia.
Besos al futuro.
Sonrojo, sonrío...
Eliminary...
un beso.
Siento que me he asomado al futuro. A un futuro seguramente más cercano que lejano.
ResponderEliminarBesos, Eva
Meiga!!!!
Eliminar:))
Besos, Alís.
Leer entre líneas
ResponderEliminarY no perderse el relato
Besos
Lo "leo" difícil
EliminarBesos
Leer entre lineas es mas seguro...
ResponderEliminary en horizontal, lo más...
Eliminar;)
A veces no saben leer. Besitos.
ResponderEliminarni quieren, ni pueden, ni lo intentan, o lo hacen entre líneas...
EliminarTe dejaron un abanico de opciones...
Tú ya elegiste la que más te gustó;)
Yo sé que además de leerme, me lees siempre bien. Gracias.
Besitos.
Todo es muy complejo, tanto las palabras dichas de más como los silencios que no son cómplices.
ResponderEliminarUn texto muy bello y hondísimo.
Besos, querida Zarcita.
El ser humano está lleno de contradicciones...
EliminarDe palabras no dichas y silencios que aúllan...
Gracias, Mire.
Besos, Bella Dama.
La maravilla de palabras camufladas entre líneas dónde algunos creer entender lo que no está escrito. Lenguaje claro para quien va dirigido.
ResponderEliminarMuy buen texto, te felicito Zarza rebeldísima. 😘
;)
EliminarGracias chaparrita.
Besototote.
Leer desde la observación, es más verídico que escuchar o tratar leer las palabras dichas.
ResponderEliminarDe silencios ensordecedores estamos hechos.
Cuántas veces no se llega, o no nos dejan más opción, que la letra.
Besos, Corsaria Rebelde.