Fresas Salvajes. Fotograma. I. Bergman, 1957.
Dormitan las horas en las desgastadas saetas que se pasean
remolonas por el destartalado minutero donde yace en su esfera cristalina el insomnio robado a un tiempo arrebolado que falleció bajo el arrecife de una tempestad de deshoras.
Yo lo borré de un plumazo, tú lo recogías como migajas y lo esparcías hacia el futuro, como si soplaras los segundos convirtiéndolos en estrellas fugaces que fabricabas mientras veíamos consumirse los rescoldos de aquellos recuerdos marchitos, que Cronos, impasible, iba aniquilando voraz por el camino allí donde Hades alimenta a Can Cerbero con los pedazos que fuimos, subidos en esa barca,
rumbo hacia el olvido...
Viene de la serie Tiempo XII en un clic (penúltimo post de esta serie).
Si había un mes trece, al que luego borraron para reacomodar el calendario que igualmente sigue desajustado, con este año bisiesto y este 29 de febrero que se avecina que tampoco acomoda del todo... ¿cómo no vamos a tener nuestro tiempo XIII?
ResponderEliminarNo estamos locos, el tiempo no se puede dividir sólo en doce. Sólo basta con levantar la vista al cielo, a esas estrellas fugaces, a ese Cronos
XIII Besos Zarza!
El tiempo... de lo más complicado de decifrar, comprender, retener o soltar. Enemigo y amigo, al mismo tiempo y contradictoriamente. Me dejas pensando Zarza.
ResponderEliminarUn beso.
Madre mía..... tremenda pluma. Te lo dice un experto, no en escritura, sino en consumir tiempo y estar cada vez más falto de él.... :))
ResponderEliminarJolines, Eva. Me has dejado sin palabras.
ResponderEliminarImagino a ese Cronos impasible haciéndonos la puñeta
Besos, lindísima
El olvido parece poder curarlo todo, mientras el tiempo impasible simplemente espera.
ResponderEliminarBesos.
Me niego a olvidar, tengo demasiado tiempo...
ResponderEliminarme gusta ocuparlo en eso.
Besos Eva.
El tiempo valioso que a veces ocupamos en dejar rastro de nosotros con valiosos textos como el tuyo.
ResponderEliminarTe dejo un abrazo 🙋♀️
A mayor olvido mayor esfuerzo marca el segundero para perdurar. Harapos de tiempo que espantan pájaros del pasado.
ResponderEliminarUn beso
Que genial ¿Te imaginas una sociedad que no mide el tiempo? :)
ResponderEliminarBesos y salud
El tiempo es un tirano.
ResponderEliminarBella canción de José Alfredo.
Muchos besos.
"Toutes les heures blessent, la dernière tue".
ResponderEliminarEl olvido siempre es utópico. Lo que se quiere olvidar está presente. Lo olvidado ni existe.
ResponderEliminarBesos.
Zarzamora:
ResponderEliminarsiempre admirador de tu prosa.
Me encantan esas metáforas tan potentes y tan "plásticas" (que se suele decir).
Poco más se puede añadir. ¡Y lo sabes! (como diría el Julito...)
Salu2 horaires.
These stories are truly incredible. Thank you for this information. เกม เล่น บอล
ResponderEliminarEsa barca que a veces navega por Leteo y otras se encamina a Estigia.
ResponderEliminarEsparcir segundos como estrellas es en sí mismo una metáfora que se crece dentro de sí misma.
(Y aquel lugar en París por el que pocos pasan...donde hay una alegoría a Cronos que te homenajea).
Mi aplauso.
Besos, Corsaria Rebelde.
Siempre encantada de leerte. Besos.
ResponderEliminarNo comprendemos lo que el tiempo es y, aun así, pretendemos reglamentarlo con minutos, segundos, horas, suspiros y llantos, gemidos...
ResponderEliminarSaludos,
J.
Gracias a todos por vuestra huella, Rebeldes.
ResponderEliminarUn beso.
Como llego tarde y ando viajando hacia atrás en tu blog, lo que vi inicialmente fue la genial fotografía y la primera frase: Dormitan las horas en las desgastadas saetas que se pasean. Creí que eso era la entrada y me fascinó. Me pareció perfecta. Luego abrí, vi que no era sólo eso y leí... para comprobar que podías mejorar la perfección.
ResponderEliminarBesos, Eva