Y finalmente no ha llovido hoy miércoles en París, lloverá mañana Jueves... ;). Los pronósticos metereológicos son a menudo como el sentimiento.
Te levantas, hace sol, y luego llueve, o viceversa. Los peores son los días de temporal, grises como el de hoy, y de frío en los que el sol juega al escondite.
Son de esos días que hacen volar las faldas y las melenas, los sombreros y todas las ilusiones que habías depositado en mí, y que mientras bajo las escaleras, despidiéndome y dándote la espalda, pero sé que seguiremos caminando, aún sin rumbo fijo.
Mi corazón lo intenta. y se miente cada día, tal vez hace años que se mira el ombligo. y sólo es capaz de entenderse a sí mismo. No es que me aterren los compromisos ni las relaciones, creo que sencillamente no estoy hecha para estas cositas del querer.
A menudo se me interpreta hasta mal. Sería incapaz de vender mi alma a otro diablo incapaz de asumirme con el pack entero, tal vez porque siempre supe de antemano que ya no quedan ni Quijotes ni Magos con chisteras, y que los Musos suelen mustiarse bebiendo un güisqui en cualquier esquina que calce un nombre de mujer.
Tengo una vida extremadamente aburrida, seria, tremendamente ajustada a una agenda donde aprendí a darle hasta una cita a los sueños.
Soy libre, eso lo sé, y es lo poco que me queda como alternativa , y sé que ese pequeño don no me lo podrá arrebatar nunca jamás ni nada ni nadie. Mi lucha contra ti, contra todos, y mi aferrarme a la vida, son pruebas supremas de que la voluntad y el libre albedrío son capaces de derrumbar cualquier frontera.
Los únicos barrotes que nos imponemos están en nuestra conciencia, en ese yo profundo que se niega a darse una oportunidad, y se sabe de antemano, antes de librar cualquier batalla, esclavo de sí mismo.
La libertad ha nacido del miedo, de las jaulas, de los años de cárcel que nadie ha merecido, de los burkas que esconden el cuerpo deseable de una mujer, del odio del hombre.
Pero mucho me temo que sólo somos esclavos y estamos presos de nuestros propios demonios; y que los barrotes que llevamos en la frente son dogmas, educación, y un largo etcétera, y que de derrocarlos, seríamos capaces de alzarnos y saborear cierta paz hasta con nosotros mismos .
La Libertad existe, vaya si existe, y por ella, gritaré hasta mi último aliento.
Algo similar nos ocurre hoy día respecto al pensamiento,- me dije-, ya que estaba.
Si somos de izquierdas hemos de ser pro-Palestinos, pro-aborto, anti-sistema, estar de parte de lo política-miente correcto, de los locos que roban en los supermercados, e intentar no defraudar a los que representan un cierto pilar de pensamiento al que agarrarnos para pertenecer a un rebaño que nos acabará merendando con sus fauces.
El problema está tal vez ahí… Somos libres, sí, y hasta para decirles mierda, y por eso pensaré lo que me salga de las narices aunque me consideréis la oveja negra.
Porque siempre lo hice, y porque siempre supe que sólo cuando formas parte del sistema y en altas esferas, puedes decirles un día en la cara que te vas, que dimites , y te sientes capaz de mandarlos a todos a la mierda.
Y eso acabo de hacer ahora mismo.
Y, ya veremos...
¡No cambies! La meteorología y los imbéciles que sigan con su ruleta rusa.
ResponderEliminarBss, leona morena!
Gracias por estar ahí... en cada instante, en cada latido...
Eliminar¿Cambiar? A estas alturas de la peli... je!
Bss. lindo gatito:)))
Mientras haya ovejas negras no todo está perdido. Nos sienta bien el negro.
ResponderEliminarAdemás de verdad :))
EliminarZarzamora:
ResponderEliminar¡va a ser que el tiempo tan cambiante nos afecta más de lo que creemos y por eso andamos tan soliviantados y susceptibles!
Las derechas están rabiosas, las izquierdas sin puntos cardinales.
En nuestra conciencia somos libres, bien dicho, y cada parcela de libertad que conseguimos hay que defenderla.
Y que nos quiten lo bailao, como cantaba aquella chica que fue a Eurovisión.
Buena música, siempre aciertas.
Salu3 climatiséd.
Diego Morales.
Así lo creo también, Diego.
EliminarComo decía mi abuela: A la cama me mandarás... pero a dormir, no.
Si hay alguna parcela que no pueden robarnos y en la que seremos libres, bien les pese, es nuestro libre albedrío.
Hay cosas que no se pueden tolerar ni dejar pasar aunque rompan nuestras cartas de dimisión.
Gracias, murcianico.
Bises fraîches et grises de ce côté.
"No sería jamás capaz de hacerte feliz ni hacerte daño..." Me conmovió este verso de tu irrefrenable prosa. De lo mejor que leí últimamente...
ResponderEliminarAbrazo de corazón!!
¡¡Exagerado!!
EliminarAbrazo grande, Carlos.
¿Cuándo hablamos? veo que hay mucho que contar...
ResponderEliminarBesos y abrazos... (todos los que puedas aguantar)
Algo hay...
EliminarBesos, muchos, y abrazos (aguanto, aguanto:) )
Me gusta que seas una oveja negra, Aunque, debido al Sistema, ya no existen ovejas negras. Como mucho, marronzuchas.
ResponderEliminarEl sistema ya se apoderó de todas las merinas, y las churras siguen al perro pastor del rebaño como borregas que son. Las marronzuchas como las negras tienen poco futuro, y ya están en vías de extinción.
EliminarSigue el encanto de vivir en París? me imagino que sí, una ciudad soñada para los que solo pensamos en visitarla aunque sea una vez.... besos!!
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