Un lobo manso no la hubiese atraído, a ella, lo suficiente. Tenía que ser feroz para motivarse a relacionarse con él. Le era irresistible. Tal como al lobo era irresistible comérsela. Va un abrazo, Zarazamora.
Lobo,lobos,lupus: si, que hay y lo malo es que se venden bien por sus encantos y una caperucita es un buen bocado y más enamorada... Un abrazo y un buen inicio de mes. P.S: Eva: esta DANA que ha generado tanta castrastrofe sobre todo en Valencia y ha dejado tanta impotencia y dolor...Mucha fuerza aún cuesta asimilarlo...
Seguro que fue una buena simbiosis.
ResponderEliminarUn beso.
Soy Ilduara.
EliminarNo hay que fiarse de los lobos
ResponderEliminarBesicos prima
Zarzamora:
ResponderEliminarsupongo que, aunque queramos, no podemos ir contra la naturaleza. Como la fábula aquella de la rana y el alacrán.
Salu2 naturels.
:)
Una bella caperucita.
ResponderEliminarNo sucedió lo que ella hubiera deseado.
Al lobo lo influyó más el apetito.
Magistral foto.
Besos.
Tiene sus riesgos amar, porque bajamos las defensas. O las eliminamos completamente. Y el lobo finalmente siguió su instinto.
ResponderEliminarMe encantó esta versión. Y sonrío.
Besos, Eva
La elección del lobo es comprensible: entre comérsela a ella o comerse a la abuelita, la eligió a ella.
ResponderEliminarUn beso, Zarza.
Negar nuestra propia naturaleza es casi imposible.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Mira que te tengo dicho que preguntes antes de abrir... que ya no estamos para según qué cuentos (ni según qué lobos) 🥰 Besitos, querida.
ResponderEliminarUn lobo manso no la hubiese atraído, a ella, lo suficiente. Tenía que ser feroz para motivarse a relacionarse con él. Le era irresistible. Tal como al lobo era irresistible comérsela. Va un abrazo, Zarazamora.
ResponderEliminarHay muchos lobos con piel de cordero y ya se sabe. Besos.
ResponderEliminarLobo,lobos,lupus: si, que hay y lo malo es que se venden bien por sus encantos y una caperucita es un buen bocado y más enamorada...
ResponderEliminarUn abrazo y un buen inicio de mes.
P.S: Eva: esta DANA que ha generado tanta castrastrofe sobre todo en Valencia y ha dejado tanta impotencia y dolor...Mucha fuerza aún cuesta asimilarlo...
Los cuentos ya no tienen final feliz. Mal plan
ResponderEliminarBesos Eva