Se vomitó el
esperma en la cera derramada entre mantillas negras y olor a
incienso.
De la serie Semana Santa, 2013. Tomás Morales
Los pasos retumban en la memoria y en la sien, en los cristos crucificados con olor a madera de
añeja pátina, tambores martilleándonos a mí la niñez, la adolescencia, y a ti, tu agnosticismo y a aquel otro su ateismo, y a muchos otros su laicidad. Más incienso. Más mantillas y con la puntilla en la nuca del deseo mutilado en
un vía crucis. La procesión de la vida nos enseñó a ser más incrédulos, menos
nosotros.
A jugar con las rejas clavadas en la frente, y a cubrirnos de tiza y pan negro los guardapolvos. No sé de qué sirve transmitir tanta miseria, fanatismo y dogmas.
A jugar con las rejas clavadas en la frente, y a cubrirnos de tiza y pan negro los guardapolvos. No sé de qué sirve transmitir tanta miseria, fanatismo y dogmas.
No pude creer en
ti, pero es que ya hace tiempo que dejé de creer en todo.
Hartazgo de cirios, hartazgo de disfraces, de hipocresía que camina para,
al final encontrarse con lo más ruin del ser humano: el secuestro de la razón y
el dominio del corazón.
¿Hasta cuándo? Hasta que excomulguemos y nos den la excomunión por tanta
suciedad con la que nos cubren cada día. El escepticismo es un regalo que nos
dieron, sin nunca esperar nada. Creo sólo en lo que siento, cuando lo siento,
pero tampoco apostaría ya por ello.
Fueron 40 largos años de analfabetismo, y aún seguimos sumidos en cierto
letargo.
Y en retroceso hacia el futuro.
Es arte, y como arte de crucificarnos la sangre que aún corre por las
venas, lo vivo, lo contemplo, y lo siento.
Con todo mi respeto a los creyentes.
Feliz Semana Santa.
Hay que mantener controlada a la masa
ResponderEliminarY lo disfrazan, eso sí, bellamente
Besos
Jajaja Coño EVA El Almendro vuelve por navidad y tú por semana santa. Joder me has dejado fuera de escuadra, que bueno; sobre todo el principio me he quedado anonadado como decía Sara Montiel. Entre el esperma, la cera derramada y el olor al incienso "pá qué te cuento". Tienes muchas razón, a pesar de los años seguimos con más de lo mismo. Pero yo creo también que la semana santa, sobre todo en sitios que tiene mucha tradición y solera, les viene bien, porque es un puro negocio. Yo pienso que mucha gente, lo hace ya más bien por interés que por devoción. Aquí por ejemplo en Torrent van pasando los capuchinos, y tienen hasta que retirarse, para que no les manchen el sayón porque tienes a la gente sentados en las terrazas de los bares, bebiendo cerveza y comiendo calamares. Yo me acuerdo que cuando era pequeño, cerraban todos los bares cines y discotecas, o sea que algo hemos avanzado. En fin sea como sea, es lo que hay. Yo ayer publiqué un poema referente al sentimiento de la semana santa, tal y como yo lo veo. Pero ya dejé muy claro, que para nada, estas fiestas van conmigo, y para postre las trabajo todas. Y sin dudas, es otra de estas fiestas religiosas, en la cual la hipocresía de la gente está a flor de piel. Pero bien, el que pueda y quiera que las disfrute. Se me olvidaba comentar un detalle, que he visto hoy en unas noticias. Un jugador de baloncesto, creo que era del Betis, no sabía nada de semana santa, ya que lleva aquí poco tiempo. Y pasando por las calles de Sevilla, vio los capirotes, capuchinos o como se llamen, y puso en las Redes Sociales, que como a estas alturas de la vida, en España revivían el Ku Klux Klan, y no es broma; vamos que el tío se lo trago. Ya le tuvieron que explicar que se trataba de semana santa, y que no tenía nada que ver, con lo que él veía y creía, jajaja. Esto si que es fuerte.
ResponderEliminarBesos querida EVA, y me alegro que publiques.
Dícese de la palabra
ResponderEliminarsin puntos ni comas
con que incensarios
botafumeiros
y personal elegido abre y cierra fiestas
duelos
súplicas y semanassinsantearinterminables
Bs
Te entiendo perfectamente.
ResponderEliminarUn abrazo
Felices días para ti. Un abrazo.
ResponderEliminarComo siempre, una cosa es la religiosidad de la gente, y otra, el uso torticero que los mandamases hacen de la religión.
ResponderEliminarSalu2, Zarzamora.
Bueno, tu ya conoces mis creencias, yo ya estoy recluido en el ranchito y de aquí, no me sacan ni con agua hirviendo, hasta que terminen las masas de regresar a sus posiciones anteriores a la SS.
ResponderEliminarPero ojo, igual me pasa con la Navidad, yo no tengo nada en contra, cojo lo que me gusta -siempre hay algo- y desecho el resto, pero a otras personas, no solo les interesa TODO, sino que llevan todo el año preparándose para estas fechas, pues si son felices, si le sacan "sustancia" a la cosa, genial para ellos, en mi no van a encontrar un oponente.
Cuídate mucho, corazón.
Besos y salud
La Semana Santa se celebra haciendo una especie de obra de teatro en las calles del lugar donde nací. Crecí bajo las reglas duras del catolicismo. Fui renunciando al dios que me enseñaron junto con las costumbres paganas del "acto de fe" teatral de los actores noveles.
ResponderEliminarToda esa representación atraía mucha gente que dejaba regada basura por doquier. Los detestaba por ello. Semana Santa pasaba a ser una calamidad. Sigue siendo al paso de los años. Todo se repite incluyendo el tiradero de basura.
¿Algún día cambiara? No lo creo.
Un abrazo Eva.
Me temo que la excomunión no nos la darán, querida Eva, ni pidiéndola al Vaticano.
ResponderEliminarAlgunos ven esto de la Semana Santa como una tradición y pocos la viven desde el verdadero sentido que encierra. Al menos ya no nos bombardean con películas bíblicas ni eternas procesiones televisadas.
Soy de ver poca tele, pero es un alivio. Jamás pusieron "La última tentación de Cristo" y con esto, tu que conoces, he dicho todo.
Besos.