SIN ARREGLO YA, Y A ESTAS ALTURAS...

 Resulta que escribir debe ser algo lúdico y no una obligación, y no lo es, para mí es un juego obligatorio (ya sabes y has podido constatar que igual te digo una cosa como te digo la otra -  otras veces, no, va- y son hasta una verdad mentirosamente literaria, mientras otras van dictadas por esta cabra que soy,  o por este punto de culo inquieto que me viene ya de fábrica) y contrariamente a ti, para mí la escritura no tiene un efecto terapéutico (no sólo, por no decir casi nunca o casi siempre), dices que hago muchas cosas, pero tres de mis raciones diarias son un par de horas de lectura, escribir en mis cuadernos donde sea o cuando puedo, y ver mis dos o un episodio de serie o una peli, además del resto de tareas hospitalarias o laborales. 

                   

La escritura es también en ciertas plumas magia, catarsis, vomitera, belleza, sátira, ironía, poesía, y hasta incluso un vertedero para lelos,  merluzo/as , necios y botarates, es tantas cosas, que lo de que escribir es mentira (como te decía al principio), es una mentira más.  Y vamos a dejarnos de hostias, que uno escribe para uno mismo primero, y para que lo lean después, si no de qué la tontería esa del fisbuk o el instagram que los lleva locos a todos mostrándose el trasero unos a otros y hasta enseñando el color del papel (del váter) y que con un insípido * ufff, ayyy, aggg, muackkkksss, o un click de me gusta, va y el susodicho escribidor/a llega a alcanzar  con este simple y básico gesto u onomatopeya/s hasta un orgasmo subliminal?

 Bah.

Escribir para mí, sí que es una obligación, como leer,  (como el desbeber o descomer cada mañana) escribir todos los días, una frase, un lo que sea, algo corto o un chorro desbordante, y así lo voy haciendo ya que creo personalmente (y es mi humilde opinión) que la escritura antes que nada es un trabajo, un ejercicio, una lección de amor, un haber leído antes y mucho, no ir de sobrado con esto, y poner a un Nóbel (y sin haberlo leído siquiera como a alguien que supo venderse para vender y ensalzar nuestra pequeña y mediocre escritura...) a la altura de cualquier papanatas, que no, que un poquito de por favor,  que como tal hay que mimarla ( a la escritura y a la lectura, ya digo) , leerla y releerla como mimamos a nuestros hijos, y otorgarle todos los cuidados y mimos que merece, que lo del blog es otro cantar, eso por ejemplo lo empecé un día que anduve aburrida, y probé y me enganché. Eso es como dicen los franceses "un panier à crabes" que se puede desde ligar ahí dentro (si un@ se deja), hasta tener enemig@s jurad@s, caer con gente de bien como con gentuza, y me pararé aquí que la lista sería interminable y me desvío del tema. Mi blog, es un caos, no tiene una línea directriz (y me la suda) comento ya a muy poquita gente, y a veces ya  no por su calidad literaria sino humana, y a otros por todo lo contrario, porque y es que va y escriben como los dioses aunque nos caigamos como el culo y ni nos comentemos, yo lo llamo refiriéndome a él (esto del blog) : Mi amado monstruo (apodo que le robé a Tomeo, pero él ni lo sabe), en él no he publicado ninguno de esos textos que escribo en mis cuadernitos, ni ensayos, o artículos, ni poemas que guardo como tesoros, es más no lo haría en la vida.

La escritura es vida, o muerte en vida,  no es mentira, y es la mentira más grande que existe.

Cada día ando peor de lo mío, (los que me conocéis ya lo sabéis)  que ya degenero y eso que yo al menos hasta me lo hago mirar (imaginaos si no me lo miraran)... un guiño sonriente.

...y así van pasando los días...

y yo escribo, yo lucho, y después siempre me ducho...

;)

y es que a partir de ya... ya ando de

vaga-ciones.

¡Cuídense!